Muchas veces se tiene una rutina de vida, dentro de la cual no se presentan sorpresas ni cambios inesperados que alteren eso. En este caso, la "rutina" en CAS era visitar el albergue de perros y convivir con ellos, así como dar apoyo de algunas formas (ya sea sacándolos a pasear, dándoles de comer, bañándolos, etc) y sin olvidar que se planteaba (en un inicio) elaborar cosas como casas hechas de materiales reciclados, etc. Sin embargo, todo tiene su final y a este proyecto le llegó su final: las cosas que queríamos desarrollar dentro del proyecto se comenzaron a volver inviables; además, la motivación de sacar adelante este proyecto se comenzó a perder. En consecuencia, se realizó su despedida el 27 de Agosto (para la cual se recaudaron S/.200 para donar algunos recursos) y de paso, se concebía un nuevo proyecto, el cual se basa en talleres para los niños de Llanavilla.
¿PODEMOS AFIRMAR QUE LA MOTIVACIÓN ES NECESARIA PARA LLEVAR A CABO UNA ACCIÓN?
Una de las causas primordiales por las que se dio final al proyecto del cuidado de perros del albergue fue por la falta de motivación que se daba a notar en algunos de los participantes. Por ende, decidimos crear un nuevo proyecto. Fue realmente una tarea difícil, ya que teníamos que ver con quien trabajaríamos (se llevó a cabo una votación sobre si sería con niños o adultos mayores, y los niños ganaron). Luego de ello, se debía de decidir en dónde se trabajaría: surgieron varias ideas, pero se escogió el Colegio Santa Rosa de Llanavilla ya que algunos de los miembros del equipo habían estado ahí para su proyecto de verano CAS, facilitando la labor ya que "ya tenían cancha" y sabían qué hacer. Hasta ahí se tenían 2 cosas: Con quién y dónde trabajaríamos, ¿pero qué haríamos? Se escogió elaborar talleres para los niños (de baile, educación física, arte, etc), y cada uno escogió el taller donde quería participar (dramaturgia en mi caso). Tras eso, se empezaron a recolectar recursos para cada taller.
Sin embargo, los problemas llegaron: uno de ellos fue que aún no se enviaba el documento de planificación al coordinador CAS para que nos diera el visto bueno y poder empezar. Por otro lado, pero no menos importante, SE CAMBIÓ EL COLEGIO: para mí fue algo inesperado, pero uno debe adaptarse a las contingencias, aunque hasta ahora desconozco a qué colegio iremos (tengo entendido que es uno en Villa El Salvador).
Tras saber ello, vimos que a pesar de decidir dar un giro de 180º al proyecto de CdD, muchos de los miembros no se sentían con ganas de avanzar. Entonces, noté algo: no siempre debes esperar a que una persona esté motivada a realizar algo si es que no lo han hecho antes, sino que cuando participen, le encontrarán gusto. A su vez, me percaté de que no debo hacer las cosas por hacerme feliz, sino priorizar el avance y felicidad de los demás. ¿Cómo así? Mucho de lo que me enseñó el proyecto de 2015 (el del Puericultorio) me hizo ver que aunque a veces era agotador, era satisfactorio ver cómo los niños (en algunos casos) podían aprender y divertirse al mismo tiempo.
EXPERIENCIAS LOGRADAS:
TRABAJA EN COMUNIDAD: Esto se evidencia en que junto a toda nuestra comunidad, pudimos empezar de cero un nuevo proyecto e incluso, con las habilidades que hemos adquirido por los proyectos que realizamos anteriormente, desarrollar uno nuevo de forma más eficiente.
CONOCERSE, ACEPTARSE Y SUPERARSE: Este aspecto lo evidencio en la medida de que pude descubrir de que al hacer algo no sólo yo debo ser el que se siente bien/a gusto (ya que eso resultaría egoísta) sino que tengo que ver que las demás personas a mi alrededor se sientan bien con lo que se hace.
EVIDENCIAS:
EXTENSIÓN: 635 palabras.















